Una nueva tendencia preocupante está surgiendo de nuestra generación obsesionada con las redes sociales, con una gran cantidad de jóvenes que usan habitualmente 'aplicaciones de edición de selfies' para cumplir con los estándares problemáticos en línea.
Si aún no lo sabías (definitivamente lo estabas), estamos viviendo en un mundo obsesionado con las selfies. Solo en 2016, los usuarios de Google Photo subieron más de 24 mil millones de selfies en todas las plataformas de redes sociales y, como era de esperar, un gran porcentaje de estos datos provino de aquellos que fueron pioneros en el selfie, Gen Z.
La Generación Z es, sin duda, el grupo de edad más impulsado por dispositivos, y los adolescentes estadounidenses actualmente gastan un promedio de siete horas al dia interactuar con alguna forma de redes sociales. Por cierto, ahora más adolescentes y adultos jóvenes sufren de desordenes de salud mental que en cualquier generación anterior. Numerosos psicólogos atribuyen en parte esta escalada a la forma en que los adolescentes se ven a sí mismos en relación con el mundo que los rodea, de los cuales redes sociales juega un papel importante.
Durante décadas, las revistas nos han presentado una subrealidad filtrada en la que los modelos se retocan y remodelan a niveles de perfección inalcanzable, y como resultado, la industria se ha enfrentado a un escrutinio constante. Muchos han afirmado que sus métodos normalizan inadvertidamente estándares físicos poco realistas.
Sin embargo, la brecha entre estas revistas y su perfil promedio en las redes sociales se está reduciendo significativamente en estos días, y los adolescentes juegan cada vez más con sus propias imágenes en las 'aplicaciones de edición de selfies' para cumplir con expectativas similares. Y, para mí, la normalización de estos programas es motivo de preocupación.
Los softwares de edición de fotos como Airbrush y Photolift se encuentran entre las aplicaciones más descargadas en las tiendas Apple y Google Play y suelen aparecer en anuncios patrocinados de Facebook e Instagram. Con estas aplicaciones, los métodos de edición profesional se reducen a kits de herramientas fáciles de entender y en gran parte gratuitos que incluyen todo, desde opciones de escalamiento de características y transformación corporal, hasta eliminación de imperfecciones, bronceado y blanqueamiento dental.
Lo más preocupante es que estas aplicaciones se comercializan como herramientas esenciales para cuentas personales, no solo como algo con lo que jugar. fotolift afirman que su aplicación es una 'excelente herramienta para editar fotos para su Instagram, perfil de Facebook o publicaciones para muchas otras plataformas de redes sociales'.