La accesibilidad a los juegos para personas discapacitadas requería equipos especializados costosos. Ahora, aplicaciones sofisticadas (y gratuitas) como MotionInput están ayudando a que el pasatiempo sea más equitativo.
Coger un mando o un ratón es algo natural para la mayoría de los entusiastas de los juegos, pero hay una gran comunidad que lamentablemente no tiene esa opción.
En el Reino Unido, 66% de los jugadores con una discapacidad o condición dicen que enfrentan barreras de naturaleza tanto práctica como económica cuando intentan jugar. En Estados Unidos, aproximadamente 46 millones de jugadores sienten este conflicto.
Para los jugadores de consola, tanto Sony como Microsoft lanzaron sus propios gamepads personalizables que han resultado útiles para algunos, pero aquellos con graves discapacidades motoras han tenido muy pocas opciones para participar.
Sin embargo, con los recientes avances en la tecnología "sin contacto", esa brecha de inclusión se ha reducido notablemente.
Aquellos que antes hubieran necesitado invertir mucho en equipos especializados, como dispositivos de seguimiento ocular, ahora pueden descargar software gratuito (de la tienda de Microsoft) con una variedad de opciones y preferencias específicas del usuario.
Funcional sin ningún contacto físico, MotionInput permite a los usuarios crear ajustes preestablecidos de control que son completamente exclusivos para ellos y su capacidad para tocar.
Los pequeños gestos, movimientos o expresiones faciales visibles a través de cualquier cámara web moderna se pueden asignar a funciones del juego. Un sistema de aprendizaje automático de IA proporcionado por Intel garantiza que el juego se corresponda correctamente.