Una startup ucraniana ha desarrollado con éxito una alternativa de empaque 100% biodegradable y extremadamente liviana hecha de raíces de micelio que se descompone por completo en solo un mes.
Si está familiarizado con mi escritura, a estas alturas estoy seguro de que es muy consciente de mi obsesión profundamente arraigada con todo lo relacionado con el micelio.
Esto es bastante comprensible, dada la cantidad de hallazgos recientes que prueban que hay muy pocos de estos fantásticos hongos no se puede hice.
Desde comunicarse con 'palabras' (como si no fueran lo suficientemente mágicos) y actuando como un pilar para la limpieza de residuos tóxicos, hasta ofrecer un nuevo – ecológico – manera de ser enterrado y convertirse en un pilar of medicina moderna, cuidado de la piely moda sostenible, La 21st siglo ha visto a las setas ocupar un lugar central.
Sin embargo, a pesar de su promesa, probablemente habría que piense en estos organismos delicados como una alternativa biodegradable al poliestireno.
Bueno, piénselo de nuevo, porque una startup ucraniana ha desarrollado con éxito un tipo de empaque extremadamente liviano que se descompone por completo en un mes y algún día podría reemplazar la espuma de poliestireno por completo.
Llamado Losa y fundada por los bioquímicos Julia Bialetska y Eugene Tomilin, la empresa de la empresa comenzó con una simple pregunta: ¿qué se puede hacer con los materiales desechables que seguimos usando a pesar de saber que están destruyendo constantemente nuestra Tierra?
De los muchos contendientes en este campo (plástico, papel y vidrio siendo los tres primeros), el poliestireno es allí arriba con el absoluto peor.
Para empezar, como es a base de petróleo, es increíblemente lento para degradarse y su fabricación contribuye significativamente al calentamiento global.
No solo esto, sino que si se desecha de forma inadecuada, puede filtrar sustancias químicas al medio ambiente, dañando las fuentes de agua y generando desechos peligrosos que afectan la vida silvestre y la salud humana.
Y si bien es técnicamente 'reciclable', hasta la fecha no existen métodos viables para reciclar poliestireno debido a las altas tasas de contaminación de alimentos y un 'mercado débil' para procesarlo.