Un dúo de adolescentes de una escuela secundaria de Massachusetts ha descubierto cuatro nuevos exoplanetas y es coautor de un artículo en el Astronomical Journal.
Ya es hora de que eliminemos oficialmente el término "pastel en el cielo".
Dos estudiantes de secundaria de Massachusetts han pasado de ser estudiantes de física entusiastas a astrónomos de renombre aparentemente de la noche a la mañana. Gracias a un programa de tutoría en el Centro de Astrofísica; Harvard y Smithsonian, ambos pasarán a la historia por descubrir la existencia de cuatro nuevos exoplanetas.
Para completar un proyecto de investigación de un año, Jasmine Wright, de 18 años, y Kartik Pingle, de 16, apuestan por ser los astrónomos más jóvenes. vez para hacer un descubrimiento revolucionario en el campo.
Esbozado en un papel en coautoría publicado por el Astronomical Journal - un enorme logro en sí mismo: la pareja divulga la investigación vital que condujo al descubrimiento de cuatro exoplanetas a más de 200 años luz de distancia. Para los no iniciados, ese es un término para cualquier planeta que orbita alrededor de un sol que no sea el nuestro.
Como parte de su Programa de tutoría para estudiantes, el Centro de Astrofísica; Harvard y el MIT pusieron a Pingle y Wright bajo la tutela del investigador postdoctoral Tansu Daylan, quien eventualmente se convertiría en el autor principal de su artículo 12 meses después. Juntos, el equipo estudió y analizó datos de la NASA. Satélite de reconocimiento de exoplanetas en tránsito (TESSA).
En órbita alrededor de la Tierra, TESS es un satélite del espacio profundo construido con el único propósito de estudiar estrellas brillantes cercanas y verificar si están o no en órbita por exoplanetas no descubiertos. En este caso, el equipo se centró rutinariamente en el 'Objeto de interés 1233', una de las miles de estrellas brillantes parecidas al sol que ya están registradas. Sus hallazgos, sin embargo, iban a ser cualquier cosa menos ordinaria.
"Buscábamos ver cambios en la luz a lo largo del tiempo", explica Pingle. "La idea es que si un planeta transita por la estrella, o pasa por delante de ella, cubrirá [periódicamente] la estrella y reducirá su brillo". Este proceso, conocido como el "método de tránsito", se ha convertido en uno de los medios más fiables para encontrar planetas inexplorados en la última década.