Lo crea o no, las lentejuelas de este vestido están hechas 100% de bioplástico y podrían proporcionar una idea del futuro de los materiales de moda de alta gama.
Ahora podría estar pensando, ¿qué es el bioplástico? En este caso, el bioplástico podría ser la respuesta a uno de los pecados de residuos plásticos más frecuentes de la moda: las lentejuelas.
En un contexto más amplio, en lugar de depender de los combustibles fósiles a base de petróleo como su componente clave (como el plástico tradicional), el bioplástico se crea a partir de materiales renovables. Por ejemplo, las lentejuelas que componen este deslumbrante vestido están hechas de algas.
Como todos los árboles y plantas, las algas secuestran carbono de la atmósfera. La creación de bioplástico a partir de este depósito de carbono da como resultado un producto que es carbono neutral. El calor se utiliza para unir las algas y formar el bioplástico. Luego se vierte en moldes que se convierten en láminas. Una vez enfriadas las láminas de bioplástico finalmente se cortan en lentejuelas.
El diseñador Phillip Lim es miembro de Uno x uno, una iniciativa que combina estilo y ciencia para desarrollar moda sostenible. En colaboración con la investigadora Charlotte McCurdy, el dúo creó este vestido verde mar sin petróleo, que representa la deconstrucción y reconstrucción de los ecosistemas marinos.
El color del vestido proviene de tintes derivados de material orgánico. McCurdy se inspiró en los métodos tradicionales de producción de pinturas al óleo, antes de la revolución industrial.
Las lentejuelas están unidas a una red similar a una red de pesca creada a partir de una fibra de algas y bambú llamada SeaCell, creada por proveedores de textiles naturales. PIRATEX. Por último, el vestido está adornado con nácar, lo que resulta en una impresionante declaración de moda sostenible, tan ecológica como llamativa.