Un estudio encuentra que los habitantes de las profundidades del océano están llenos de microplásticos

¿Qué nos dice esto?

Los autores del artículo describen una fea verdad.

"Estos organismos no migratorios, que se cree que permanecen relativamente [estancados] en las profundidades durante toda su vida, están expuestos al plástico", afirmó el estudiante postdoctoral de Harvard, Ryan Bos.

En otras palabras, se podría pensar que estos animales, que pasan todo su tiempo en el fondo del océano, saldrían ilesos de las actividades que tienen lugar en la tierra o en la superficie del agua.

Sin embargo, ellos lo tienen peor. Los microplásticos arrastrados al mar por los fuertes vientos y la contaminación flotan en la columna de agua del océano y se depositan en los sedimentos del fondo del océano. A medida que los animales pequeños se alimentan, ingieren diminutas partículas de plástico que están cubiertas de varios tipos de bacterias.

El tipo de plástico que se encuentra más comúnmente en los estómagos de los habitantes del fondo del océano es el celofán, la película delgada que vemos utilizada con mayor frecuencia en los envases de alimentos y cosméticos. El celofán también se puede utilizar como pintura de resina en los barcos.

Los peces grandes suelen ingerir trozos de plástico más grandes, mientras que los crustáceos tienden a alimentarse de microplásticos más pequeños.

¿Cómo afecta esto a su salud?

Aunque ha habido poca investigación sobre los efectos a largo plazo que tiene la ingestión de plástico en la salud de los organismos oceánicos más pequeños, podemos recurrir a la abundante investigación sobre animales marinos grandes para comprender cuáles pueden ser las consecuencias.

En primer lugar, está la realidad de que la ingestión de trozos de plástico, sin importar el tamaño, tiene el potencial de causar daño físico a pequeñas criaturas del océano al desgarrar los tejidos blandos del interior de sus cuerpos.

Después de la digestión, los efectos documentados sobre la salud en animales más grandes incluyen una velocidad de nado reducida, tasas de reproducción deterioradas, mayores niveles de estrés, absorción reducida de nutrientes y muerte.

Tampoco está claro cómo los productos químicos utilizados para mejorar el rendimiento y la apariencia del plástico (incluidos los tintes y los retardantes de llama) afectan a los animales una vez que se descomponen durante la digestión.

Finalmente, existe una probabilidad extremadamente alta de que los microplásticos nunca se descompongan por completo y pasen a lo largo de la cadena alimentaria, causando problemas de salud a todos los depredadores y presas... incluidos los humanos.

Aunque pueda parecer que nuestro planeta está irrevocablemente arruinado por el plástico, estudios como este están ayudando a construir argumentos más sólidos a favor de la prohibición global de los plásticos de un solo uso para siempre.

Hasta entonces, todos podemos hacer nuestra parte limitando la cantidad de plástico que utilizamos a diario. Si está buscando formas sencillas de comenzar, consulte nuestra guía para un estilo de vida sin plástico. esta página.