Los científicos estaban emocionados de confirmar el avistamiento de una ballena gris en el Océano Atlántico 200 años después de su supuesta extinción regional. La advertencia es que los impactos del cambio climático probablemente sean los responsables.
Ha llegado un apasionante descubrimiento biológico con un lado no deseado de preocupación existencial.
Los científicos han confirmado la presencia de una ballena gris frente a las costas de Nueva Inglaterra. Durante 200 años se pensó que la especie estaba extinta regionalmente en el Océano Atlántico, pero la quinta observación en 15 años derribó ese mito.
La ballena, que puede pesar hasta 60,000 libras, prácticamente desapareció del Atlántico hacia el 18th siglo, por lo que los investigadores se mostraron escépticos cuando avistaron inicialmente a la criatura frente a la costa de Nantucket, Massachusetts, el 1 de marzo.
Siguiendo a la ballena durante 45 minutos, varias fotografías pudieron confirmar el encuentro histórico a través de las barbas moteadas distintivas de la especie y la ausencia de aleta dorsal.
'No quise decir en voz alta de qué se trataba, porque me parecía una locura', reveló Orla O'Brien, investigador del Centro Anderson Cabot para la Vida Oceánica del Acuario de Nueva Inglaterra.
Las ballenas fueron cazadas hasta el borde de la extinción durante la era de caza comercial de ballenas, pero desde entonces se han recuperado en cantidades tales que los organismos de conservación la consideran una especie de "menor preocupación".
Sin embargo, la población de ballena gris en Asia sigue en peligro, ya que varias naciones vecinas continúan rechazar propuestas de prohibición.