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Hielo de 10,000 años conservado para mostrar la vida antes del cambio climático

Como parte de un proyecto internacional llamado Ice Memory, los investigadores han extraído y almacenado hielo de 10,000 años de los Alpes. Completamente intactas por el cambio climático, estas muestras se consideran artefactos naturales antiguos.

Aparentemente, no se trata solo de semillas que se guardan y se conservan en una de las cada vez más numerosas 'Bóvedas del Juicio Final' del Ártico.

Este mes, un equipo de investigadores se aventuró a Alagna Velsesia en Vercelli y escaló el Monte Rosa, la segunda montaña más grande de los Alpes y Europa occidental. Al llegar a un glaciar a 4,500 metros sobre el nivel del suelo, el equipo comenzó a extraer hielo.

Parece un largo camino por recorrer, ¿verdad? Como viajar por los océanos en busca de agua salada.

Al contrario, la expedición de cinco días fue muy necesaria. Al regresar triunfalmente a Capanna Margherita, un centro de investigación de 128 años (no un centro de vacaciones de montaña), el equipo trajo consigo cuatro núcleos de hielo perfectamente conservados formados Hace años 10,000.

Crédito: Universidad de Venecia

Completamente inalteradas por la humanidad, estas muestras de hielo son un raro remanente natural de vida antes del cambio climático. Desde mediados del 19th siglo, los investigadores estiman que el glaciar circundante de 15 millas ha perdido el 40% de su área debido al calentamiento global.

Teniendo en cuenta que nuestras emisiones de carbono están ahora en Máximos record, y son responsables de un Disminución del 10% en el hielo del Ártico cada 10 años, el tiempo es fundamental para recolectar estos artefactos antiguos para estudiarlos ahora.

"Si perdiéramos archivos como este, perderíamos la memoria de cómo la humanidad ha alterado la atmósfera", dice Fabio Trincardi, director de tecnología medioambiental del Consejo Nacional de Investigación de Italia.

Este mismo sentimiento lo comparte una cohorte de glaciólogos europeos que, en 2015, lanzaron una misión llamada Memoria de hielo. En asociación con científicos y grupos de investigación de todo el mundo, se está formando una base de datos completa basada en el estudio práctico de núcleos de hielo excavados.

Dispersos en varios laboratorios de investigación hoy, se espera que para 2022 todos los núcleos de hielo eventualmente se almacenen en una sola instalación ubicada, lo adivinó, en la Antártida. Entre esto y el bóveda de semillas en Spitsbergen, el área puede terminar obteniendo su propio código postal.

Con toda seriedad, la organización estima que para fines de siglo no nos quedarán glaciares en alturas por debajo de los 3,500 metros en los Alpes y 5,400 metros en los Andes. Salvo un drástico reducir las emisiones, eso es.

Aparte de la mancha obvia que la eventualidad dejaría en la conciencia de la humanidad, también representaría una enorme pérdida de evidencia científica en el estudio de la causa y el efecto del cambio climático.

Ahí lo tenemos, otra entrada más al archivo interminable de formas en que el cambio climático está destruyendo el planeta.

Esperemos que todo lo que hemos perdido hasta ahora no sea en vano.

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