España se está calentando a un ritmo más rápido que cualquier otro país europeo. En un esfuerzo por proteger a los habitantes de la ciudad del empeoramiento de las olas de calor, el gobierno español está considerando pintar de blanco los edificios icónicos de Barcelona.
El paisaje urbano de Barcelona ha sido aclamado durante mucho tiempo por urbanistas y novatos en arquitectura por su diseño práctico y sus abundantes características naturales.
Pero los científicos del clima advierten que los esfuerzos actuales para expandir los espacios verdes locales no serán suficientes para mantener fresca la capital a medida que las temperaturas continúan disparándose en todo el país.
España ha sido recientemente identificada como la país de más rápido calentamiento en el hemisferio norte, y aunque Barcelona está bien diseñada y salpicada de vegetación, es una de las áreas más densamente pobladas de Europa. Se sabe que sus calles angostas y sus casas abarrotadas mantienen el calor en los calurosos días de verano.
Este es un problema creciente a medida que el mundo continúa calentándose. Barcelona se ha visto afectada por olas de calor sin precedentes en los últimos años, con niveles de temperatura anuales que aumentan entre 1.7 y 1.9 grados centígrados en las zonas urbanas.
Por ello, científicos de la Universitat Autònoma de Barcelona han propuesto un proyecto de adaptación climática que consiste en pintar de blanco los tejados de la ciudad. Dicen que podría reducir las temperaturas atmosféricas hasta en 4.7 grados durante las olas de calor.