Las inundaciones de Venecia hacen que la negación del cambio climático sea indefendible

Zanoni apuntó especialmente a Luca Zaia, el presidente del Véneto y político de la Liga, por presentar un presupuesto que no contenía "ningún plan concreto para abordar el cambio climático".
Argumentar en contra de implementar una reducción de emisiones de carbono bastante sencilla mientras está sentado bajo 1.54 metros de agua socava cualquier afirmación sobre la ignorancia climática que estos políticos podrían haber esperado hacer, y esencialmente los obliga a una posición en la que deben admitir su propio interés.

'Pensamos que sería más dañino recortar las tasas de empleo' no es solo una farsa diseñada para evitar la reestructuración del empleo de acuerdo con el Acuerdo de París, sino que ahora se enfrenta directamente a la evidencia de que Venecia estará bajo el agua dentro de un siglo, según un informe de 2017 de la Agencia Nacional Italiana de Nuevas Tecnologías.

Al mismo tiempo que Venecia se llena de agua, la costa de Nueva Gales del Sur en Australia está siendo devastada por su primera y más severa temporada de incendios desde que comenzaron los registros. Incluso para el discurso político australiano moderno, que siempre se ha inclinado hacia los alarmantemente ignorantes (lo digo como australiano), las respuestas del primer ministro Scott Morrison y del viceprimer ministro Michael McCormack han sido discordantes.

'¡Hemos tenido incendios en Australia desde que comenzó el tiempo!' McCormack le dijo a la Australian Broadcasting Corporation (ABC) a través de su máscara de gas mientras el humo se elevaba alrededor de sus sienes.

Los comentarios se hicieron el lunes pasado cuando Australia se despertó con la noticia de que la catastrófica emergencia de incendio que enfrentaba, que amenazaba su hogar en gran parte de la costa este, ya se había cobrado tres vidas. Y todo esto antes incluso de que comience el verano.

Queensland ha estado luchando contra la temporada de incendios desde septiembre, apenas un mes desde que terminó el invierno.

La reacción de McCormack a la gente que tuvo la audacia de vincular la temporada de incendios forestales cada año con el cambio climático fue llamarlos 'verdes puros, iluminados y despiertos de la capital' en la radio del desayuno.

Este es el mismo gobierno que continúa apoyando la construcción de más minas de carbón, se niega a cambiar cualquier sector a la energía renovable y mantiene a Australia como el tercer mayor exportador de combustibles fósiles. Pero sí, los incendios definitivamente no están relacionados.

Cuanto más los políticos crean que pueden salirse con la suya con la negación del cambio climático mientras que los efectos físicos del desastre se pueden ver y sentir, más revelan la naturaleza deliberada de sus políticas dañinas. El hecho de que los votantes que siguen poniendo a estos políticos en el poder tengan que evacuar sus hogares o atravesar lo que solían ser sus calles para darse cuenta de la necesidad de una política ambiental es, en el mejor de los casos, irónico y, en el peor, trágico.