¿Por qué Behrouz Boochani es tan conocido?
La historia de Boochani es complicada y toca las complejas relaciones internacionales y políticas de refugiados. Creció en Irán durante la década de 1980 cuando el ejército de Irak invadió la región, comenzando un conflicto que duró la mayor parte de esa década. Después de graduarse de la universidad, escribió artículos para varias publicaciones que promovían la cultura kurda (un grupo étnico iraní) y también fue miembro del Partido Democrático Kurdo, que ahora está prohibido en Irán. Boochani temía por su vida y huyó de la turbulenta situación política en su país de origen en 2013, viajando hacia Australia en barco antes de ser detenido por las autoridades de inmigración. Permaneció atrapado en la isla Manus durante seis años.
Mientras estaba bajo la mirada de las autoridades de inmigración, Boochani se filmó en secreto en el campamento y escribió una memoria completa a través de WhatsApp, enviando mensajes de texto a periodistas y a un traductor en Australia. El trabajo resultante, Ningún amigo excepto las montañas, ganó el Premio Victoriano de Literatura a principios de 2019, lo que convierte a Boochani, irónicamente, en uno de los escritores modernos más prolíficos en un país al que se le prohibió ingresar.
Boochani se ha convertido en un nombre internacional ya que su trabajo ha obligado a los australianos y al mundo a mirar profundamente una crisis que es fácil de esconder debajo de la alfombra. Sus escritos y artículos interrumpen la narrativa política y los estereotipos de los refugiados que muchos (particularmente los políticos de derecha) utilizan como justificación para la postura de línea dura del país sobre la inmigración.
En pocas palabras, Boochani es la voz de un grupo de personas silenciadas y oprimidas que han sido forzadas a un estado de limbo. Su trato en el centro de detención de la isla de Manus no es ético e inhumano, contradice al gobierno supuestamente liberal y democrático de Australia, y se ha convertido en un tema más urgente y prominente gracias al periodismo de Boochani.
Si bien ahora puede estar libre, Boochani todavía siente un sentido de responsabilidad y culpa por las personas que actualmente están atrapadas en la isla Manus. "Nunca podremos dejarlos en esa isla", le dijo a The Guardian. No está claro qué pasará a continuación, pero espero que escuchemos mucho más de él en los próximos meses.
¿Cuál es la situación actual en la isla?
En este momento, todavía hay muchos atrapados en las instalaciones de Manus Island que no han sido procesados adecuadamente. El campo de detención original en el que estaba recluido Boochani ahora ha sido demolido y declarado ilegal, pero en realidad no pudo irse sin documentación, y varios cientos de personas varadas siguen atrapadas.
Australia ha rechazado sistemáticamente la oferta de Nueva Zelanda de reasentar a 150 refugiados al año de las islas de Manus y Nauru, argumentando que socavaría su estricta política de inmigración ilegal por barco.
El número estimado de personas en la isla Manus que buscan asilo en Australia se ha reducido de 1,353 a 300, lo que significa que este es un problema que afortunadamente está retrocediendo en lugar de desarrollarse.
El nuevo primer ministro de Papúa Nueva Guinea, James Marape, ha argumentado que Australia debe desarrollar un plan para que los refugiados restantes sean reubicados adecuadamente; ahora han sido invitados a quedarse en Papúa Nueva Guinea, pero esto, como todo en esta historia, viene con sus propias complicaciones. Muchos de los términos son vagos y el futuro de cada individuo aún es incierto, incluso después de seis años de tratamiento terrible.
Actualmente, Boochani es un hombre libre en Nueva Zelanda y permanecerá en el ojo público en el futuro previsible. A dónde irá todavía no es absolutamente concreto a pesar de la oferta de Estados Unidos, pero una cosa es segura: tiene motivos para sonreír, algo que probablemente no ha tenido en mucho tiempo.
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