El mundialmente famoso paseo acuático de Disney 'Splash Mountain' cerró sus puertas por última vez esta semana. Su procedencia racista destaca a una generación desilusionada de 'Disney Adults' con mucho de qué quejarse.
Splash Mountain sigue siendo una de las atracciones más populares y famosas de Walt Disney World en Florida desde que abrió en 1992.
Pero la semana pasada la atracción cerró sus puertas por última vez, ya que Disney respondió a crítica a largo plazo de su asociación con la película de 1946 'Canción del Sur'.
Incluyendo personajes y música de la película, ambientada en una plantación de Georgia después de la Guerra Civil, 'Splash Mountain' ha sido criticada por su conexión obsoleta con las representaciones racistas de la gente y la cultura afroamericana.
Disney anunció que cerraría el viaje en 2020, después de que una petición de Change.org que afirmaba que 'Song of the South' estaba incrustada en 'tropos racistas extremadamente problemáticos y estereotípicos' recibiera 21,000 firmas.
La petición también pedía que Disney reemplazara el paseo con uno en honor a 'La princesa y el sapo', que fue la primera película de Disney en presentar a una princesa negra, Tiana, en el papel principal.
La empresa ha cumplido, al parecer, ya que Splash Mountain será reemplazado por 'Tiana's Bayou Adventure' este año.
Pero no todos están contentos con el final de Splash Mountain.
Tras la noticia, 99,000 personas firmaron una contrapetición a 'Save Splash Mountain', y en las últimas horas antes de su cierre, se vio a los visitantes haciendo cola durante más de dos horas para abordar la atracción.
El hashtag de TikTok '#goodbyesplashmountain' tenía 1.6 millones de visitas el martes.
Los 'adultos de Disney' parecen constituir la mayoría de estos fanáticos descontentos. El término, que a menudo se usa con connotaciones despectivas intencionadas, se refiere a una generación anterior de fanáticos de Disney en gran medida fuera de contacto con los problemas sociopolíticos y las conversaciones del mundo real.
El verano pasado, Rolling Stone se refirió a los 'adultos de Disney' como 'el grupo [de personas] más odiado en Internet', 'una plaga para la sociedad' que sería 'el fin de la civilización occidental'.
Por dramático que pueda ser, los fanáticos mayores de Disney continúan provocando el desdén de la sociedad en general, en gran parte debido a su ignorancia y privilegio percibidos.
'Con su énfasis en vender 'momentos mágicos' y 'hacer realidad los sueños', Disney vende una versión poco sofisticada de cumplimiento de deseos a los consumidores, que voluntariamente gastan miles de dólares en una auténtica experiencia emocional que saben que […] no es realmente auténtica en absoluto', dice Ej Dickson.
Y tal vez esta flagrante ignorancia no se haya vuelto más clara que a raíz del cierre de Splash Mountain.
Después de todo, Disney no es exactamente conocido por su historia inclusiva, su historia impecablemente limpia. En 2022, la empresa fue objeto de fuego público después de que el CEO Bob Chapek defendiera sus $250,000 en donaciones para el controvertido proyecto de ley 'Don't Say Gay'.