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El suicidio del director genera debate sobre las inspecciones de Ofsted

Ruth Perry se quitó la vida después de que un informe degradara su escuela de 'Sobresaliente' a 'Inadecuada'. Los docentes y los responsables políticos están instando a un boicot nacional de Ofsted.

Los sindicatos educativos han pedido un boicot a Ofsted e instaron a los maestros a negar el acceso de los inspectores a sus escuelas, después de que la directora Ruth Perry, de 53 años, se quitara la vida. 

Perry fue considerada una educadora 'en su mejor momento', que trabajó en la escuela primaria Caversham en Reading. Su suicidio fue provocado por un mordaz informe Ofsted que rebajó su escuela de 'Sobresaliente' a 'Inadecuada'. 

La familia de la Sra. Perry dijo que Ofsted sometió a la directora a un estrés casi inmanejable, y consideró la inspección de noviembre como el 'el peor dia de su vida". 

La muerte de Ruth ha provocado una gran cantidad de apoyo entre los profesionales de la educación, lo que obligó a muchos a reconsiderar la legitimidad de Ofsted como organización. 

La protesta pública por las inspecciones de Ofsted se ha desatado durante años, y el suicidio de Perry ha sido un punto de inflexión en el discurso nacional sobre el sistema educativo británico y las instituciones dogmáticas que sirven tanto para sostenerlo como para destruirlo. 

Los directores de todo el país se han solidarizado con la historia de Perry y han compartido sus propias experiencias de presión bajo el gobierno de Ofsted.

Dr. Mary Bousted, secretario general del Sindicato Nacional de Educación (NEU) dijo que se requería un nuevo sistema que priorice 'el bienestar de los líderes y el personal que trabaja tan duro con los niños y jóvenes en su comunidad', 'necesitamos un sistema que sea de apoyo , eficaz y justo'. 

Ofsted se introdujo en 1992 como una forma de informar a los padres sobre el rendimiento escolar y garantizar el mantenimiento y la mejora de los estándares. Pero durante mucho tiempo ha sido criticado por quienes trabajan en la profesión debido a la gran presión que pone en juego sobre los maestros. 

La pandemia solo ha aumentado el número de víctimas en las escuelas, que enfrentan altas tasas de ausentismo, menos personal y retrasos en el aprendizaje de los niños. 

Sin embargo, luego de una pausa en las inspecciones provocada por Covid, Ofsted las reintrodujo en 2021 con un cronograma acelerado que verá todas las escuelas y universidades inspeccionadas para 2025. 

Después de covid, Ofsted también anunció el fin de la exención de las escuelas previamente marcadas como "sobresalientes", lo que significa que todos los directores viven constantemente "con miedo a la llamada" que llega el día anterior a una inspección. 

La escuela de Perry no había sido calificada en más de 13 años, debido a una calificación previa de 'Sobresaliente'. A pesar de una 'buena' calificación en casi todas las categorías, Ofsted rebajó la calificación de la escuela de Caversham en términos de liderazgo y gestión, donde cree que hubo una protección inadecuada, particularmente en términos de supervisión en los recreos. 

Esto llevó a la escuela a 'Inadecuada', la calificación más baja posible. 

Se ha culpado a un cambio de 2019 en el sistema de inspección Ofsted por estas clasificaciones más impredecibles, con resultados impulsados ​​por factores más subjetivos como la "sustancia de la educación", en lugar de resultados y datos. 

Muchos creen que el sistema de calificación de Ofsted está en el centro del problema y en la conclusión principal de la muerte de Perry. Calificar a las escuelas como 'Sobresaliente', 'Buena', 'Requiere mejorar' o 'Inadecuada' es un enfoque demasiado simple que no puede tener en cuenta adecuadamente las complejidades y el trabajo duro que conlleva el funcionamiento de una escuela. 

'Si eliminas la calificación', dijo un director, 'una gran cantidad de esa presión desaparecería prácticamente de la noche a la mañana'. 

Las inspecciones de Ofsted se han considerado extremas durante mucho tiempo. Pero la muerte de Ruth Perry marca un momento significativo en la percepción pública de la organización. 

La hermana de Perry, Julia Waters, instó a las escuelas a boicotear las inspecciones y negar el acceso a los funcionarios de Ofsted. Muchos están escuchando. 

La NEU ha recibido más de 40,000 firmas de educadores profesionales para una petición que pide la abolición total de las inspecciones Ofsted. Será entregado al Departamento de Educación esta semana.

Ofsted aún no ha comentado. Pero el director regional para el sureste, Matthew Purves, compartió sus condolencias por la familia de Perry esta semana. 

'Nuestros pensamientos permanecen con la familia de la Sra. Perry, los amigos y todos en la comunidad de la escuela primaria de Caversham'.

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